Textos Sin Cohesión
miércoles, 20 de mayo de 2015
10:05 pm lluvia
Tiendo a extrañarlo cuando apenas y cae la noche, recae en mi un sentimiento de culpa porque le entregue todo y porque no recibí nada a cambio; creo que esa dicotomía me carcome el alma quise darle tanto y usted estaba ahí de pie como si mis balas no le perforaran un centimetro de sí ¿qué le hice? cada noche me devora un sentimiento casi inexplicable, lo extraño y entonces empiezo a recordar como sus manos se ajustaban a mis caderas y como nos entregabamos en un extasis infinito pero efímero, creo que cada te quiero se iba desvaneciendo en cada beso, cada momento fue tan solo eso, un momento. Bajo por la octava y llueve, es porque la ciudad se ajusta a mi sentir y los transeuntes me susurran al oído que debo dejarlo ir porque simplemente aquí nada importo, cada paso que doy es un recuerdo que voy pateando pero mi alma, pobre mi alma, no se compadece de mí y empieza a lanzar sollozos, la escucho tan indefensa tan sensible tan menos yo que antes; necesito un lugar donde encender lo que llevo dentro, pero solo enciendo un marlboro rojo que traigo conmigo y la ceniza se va disipando en el aire, mis piernas empiezan a sentir como la ciudad se llena de agua, mis ojos se tornan amarillos por cada luz, mis dedos empiezan a encogerse uno por uno, parece que el frío esta de mi parte porque esta haciendo toda una confabulación para que lo deje ahí, botado en cualquier charco, quizás debo dejarlo oliendo a olvido oliendo a ciudad muerta dejada desolada, llena del smog que me impregno su amor, aunque quiero tenerlo justo frente a mí para abrazarlo y celebrar su partida, usted simplemente no esta porque no quiere, porque sus pasos son mas pequeños que los míos, porque yo voy hacía el sur y usted va hacia el norte, porque usted se estanca y yo sigo... Me costo días, hasta meses entender su filosofia, una filosofia donde no encaje. Apago el cigarrillo y enciendo mi vida, doy unos pasos más pero usted sigue apareciendo, es un fantasma que aparece con flores y corazones ¿quién es usted? me siento en la mitad de un parque y me dejo llenar por los recuerdos empiezo a llorar junto a las nubes, imagino luces verdes azules amarillas rojas rosadas y usted sigue ahí, tan latente como el primer día. Disculpe traerlo a este texto, quisiera escribirle palabritas llenas de sentimientos completos y no tan rotos como los de ahora, quiero decirle adiós con mi mano izquierda y la derecha ponerla justo en mi pecho para simbolizar que lo arranco, lo arranco pedacito a pedacito y en cada uno de ellos se me va un cuarto de vida, en cada suspiro mi pecho se comprime...
jueves, 20 de febrero de 2014
De Toña para Tomas
A mis 16 años me enamoré perdidamente de Tomas, él era una persona versátil lleno de grandes ideas y escribía poemas porque si. Recuerdo que nuestro primer beso sucedió en el colegio mientras hablábamos de la gente que pasaba. El paso siguiente fue conocer a sus amigos y su rutina, se sentaban en un parque a hablar de escritores, cuentos, poemas, canciones y cosas parecidas. ¿por qué a las mujeres nos gusta que nos presenten como la novia? ¿nos gusta parecer un trofeo que alguien exhibe? para ese entonces mis preguntas no eran las mismas, yo me sentía feliz porque andaba de su mano y para mi el mundo era diferente.
- Me amas?
- podría decirtelo de otra manera para no sonar como a todas las parejas
- no me importa que suene igual, tu lo dices con las babitas suspendidas en el aire
Así pasaban los días junto a Tomas, largas charlas con café, amigos, libros y escritos a medio armar. Por mi parte no había estado en una relación que exigiera compañia, fidelidad, amistad, seriedad y un tipo de cosas que a los 16 años son irrelevantes para cualquiera, esta suena a cualquier historia de amor una que otra pelea un final como todos y una adolescente escribiendo con el amor elevado, pero no.
los opiáceos son producidos por el mismo cuerpo, claro que estos son opiáceos endogenos, sustancias segregadas por el cuerpo para, de alguna manera, exitar o inhibir el cuerpo. También vienen en pastillas, papeletas, diluidos, en cartones y en cualquier tipo de presentación imaginable. Con Tomas la vida era al cien, el creepy en la mañana, en la tarde un poco de heroina para que la sangre nos enamorara mas, en la noche marihuana natural y mientras leíamos, tomábamos café y escribíamos con sus amigos, lsd.
Luego de seis meses mi aspecto había cambiado, me veía ansiosa, el movimiento en mis manos era cada vez mas rápido, la sensación de lucidez ya no estaba en mi, el cabello estaba desarreglado y quienes me decían "amiga" ya me decían marihuanera ¿qué tanto daño hay que hacerse para tomar amor propio? el suficiente, pensaba yo. Me sentía hundida, en cualquier pasillo del infierno, la vida se me estaba yendo en papeletas de colores, no tenía manos amigas por que todas me señalaban. No pretendo generar conciencia en nadie y mucho menos crear un pesar efímero, pretendo que esta carta la lea Tomas, pretendo que sepa que mientras yo lo amaba él fraguaba todo para hundirme más, conseguía cada vez mas drogas. Claramente, él no me obligo a consumir, a lo que me acribillo como cualquier gañan fue a estar con él o sin él en todo, si quería su amor también queria las drogas ¿es claro el desprecio tan infinito que me podía tener yo misma?
Después de verme tan mal, decidí pedir ayuda ¿adivina qué Tomas? nadie me ayudo porque mientras yo intentaba salirme tu llegabas con unos cuantos besos y droga en tu maleta. Me llene de odio, un odio exquisito y permisivo hacia ti, empece a quererme y respetarme, a recordar que clase de persona era antes de conocerte. Entonces, fue cuando terminamos y tu amenazaste con no darme mas drogas, aquí fue lo mas duro, tuve que ir a clases y salir corriendo para no verte, llegar a mi casa ponerme audífonos y perderme en cada letra, sin drogas pero con ansiedad. Me dejaste un sabor amargo en la boca, los días apresurados y una sensación inexplicable de experiencia. Fueron meses duros, inclinada al cigarrillo, pensaba en ti y tus duras condiciones para hacer parte de tu vida ¿cómo es posible seguir enamorada? El día del grado no me presente, temía retroceder en ese proceso que se me estaba haciendo tan difícil. Tú me llevaste el diploma a la casa, una caja de chocolates y 5 cartones de lsd ¿cuanto daño debias hacerme para quedar bien contigo mismo? recaí, te bese y todo fue como estancarnos en unos meses atrás. El resto tu lo sabras Tomas, quería hacerte un pequeño recuento y decirte que hace un año deje las drogas, sufro de taquicardía y ansiedad pero nada que no se pueda controlar, cambie de números y de casa, estoy estudiando ingeniería industrial y cada vez que me queda tiempo voy a visitar a Mauro ¿recuerdas a Mauro? ¿el que se murió de una sobredosis en el pico del aguila? pues esta bien, le pongo flores rojas y le cuento como he cambiado, también le hablo de las ganas enormes que tengo de verte para que me veas bien, también espero que estés bien.
Con toda el odio del mundo, de Toña para Tomas
lunes, 10 de febrero de 2014
Una noche, como cualquier noche, a su lado
Me llamo Simona y soy apática en el amor, mis relaciones jamás han durado años y tampoco quiero una que dure mas de ocho meses, tiendo a aburrirme con las personas luego de unos meses y cuando se fijan en ello se decepcionan hacen un gran show, esperando una respuesta alentadora de mi parte, yo los dejo ir y nada más pasa. Con usted no es diferente pero si describiera sus ojos cafés llenos de drogas me encantaría también describir las innumerables sensaciones, que sobresalen en mi, cuando estoy a su lado.
Cuando su respiración esta en mi cuello, mi palpitar se acelera y a veces hasta creo que la taquicardia da visos de existencia, pero su mano se junta a la mía y todo entra en paz, sus palabras empiezan a calar hasta el fondo de mi existir; es ahí cuando un beso es el culpable de querer explorar su silueta y quedarme con cada parte en mi memoria, aprenderme cada parte de su cuerpo, me encargo de sentirlo un poco mío siendo consciente que esto no es insano, sus labios rozan mis piernas, es en ese momento cuando un mar de sensaciones se vienen sobre mi y me dan ganas de estallar como la lluvia en el cielo, me dan ganas de mojarle los días y la vida, de fondo tenemos música que suena y nos deja sonrisas, sonrisas que se van evaporando a cada momento, en cada sentir. Esto es tan efímero como el sentimiento que hay entre los dos, ¿ ya le dije que esto va en contra de todo lo imaginable?. Suena Should I stay or should U go de the clash y entonces el sucumbir de sus deseos junto a los míos crean el éxtasis perfecto para cantar y amarnos un poquito, todo mientras empieza a hacer frío y abrazarnos.
Me gusta contemplar cuando el sol entra por la ventana y usted se despierta, empieza a buscar sus cosas se sienta a mi lado, toma un café y después de un "buenos días Simona" sigue su vida, yo retomo mis colores y nos volvemos a ver para encontrar esa lluvia infinita entre nosotros con un cúmulo infinito de sensaciones.
miércoles, 22 de enero de 2014
Una payasada mas
Cuando empiezo a pensar en usted me pongo un poco ensimismada, cruzo los brazos y miro al cielo sin ningún ánimo de encontrar respuestas, ¿quiere usted decirme cómo sucedió todo? pasó mientras mis sentidos estaban, notablemente, alterados. Paso frente al cancerológico y pienso que realmente hay mas penas que las mías, más graves mas grandes mas importantes. Tres calles mas abajo veo una funeraria "la mejor madera en su cajón" que aviso mas estúpido, cuando este muerta y bien fría espero que no me metan en una caja de esas donde, por un día, exponen el cuerpo, una que otra persona llora, todos hablan de la posición de sus manos y de sus labios blancos y partidos, imaginarme la escena ya es humillante. Sigo calle abajo y me encuentro la hortua, todo tan junto como en la vida, ¿sur o norte? ¿transmilenio o bus? sigo con los brazos cruzados porque el frío cadavérico que invade esas calles es tal que el sol se asoma pocas veces. Por el agite de los días, las personas salen tan rápido de las estaciones o se bajan dando un brinco de los buses y cruzan las cebras para montar las aceras y empezar esa cabalgata donde el asfalto debe ser el mejor equino, ponerse suave y dejar que el jinete lleve las riendas sea cual sea el destino. Ahora los entiendo cuando ustedes hablan de tomarse el tiempo necesario para pensar, mi decisión ahora es diferente, no buscaba respuestas pero las encontré mientras al lado de un puesto de dulces fumaba un kool y endulzaba una aromática, me di cuenta que todo pasa tan rápido como se quiere, el tiempo no va como quiere ir si no que va como usted lo quiere llevar, las relaciones empiezan porque usted quiere, usted sufre porque quiere, usted se ilusiona porque quiere, usted puede manejar todo si quiere. Subí al transmilenio quite a una señora de una silla con la falsa excusa de un pie tronchado, mis audífonos se conectaron a mi alma y la ventana me sirvió de almohada, la señora que me dio la silla se encargo de despertarme en el portal, estaba tan cansada que salí con las manos entre los bolsillos y bostezando, sé que la señora pensó lo peor de mí, una hora parada esperando un puesto y yo durmiendo lo mas de placida para despertarme y salir con el pie completamente aliviado, salí del portal y camine hasta la casa, me restaba media hora, iba en sentido contrario y tenía el alma en paz ¿otro cigarrillo? no, por ahora restaba sentir un poco el frío de las siete de la noche, caminar y no pensar en nada. Se me ocurre que alguna vez lo quise, que lo desee tanto que ahí se me quedaron varias horas con días. Otro kool, un lugar conocido, una sensación diferente y un hasta luego para usted, quédese con todo, me gusta construir dejar a medias y largarme.
sábado, 30 de noviembre de 2013
Escribiendo finales ...
¿Recuerda las calles sin fin que nos reconocieron? de fondo sonaba sex Pistols, las manos entrelazadas el cielo tan azul y los días jodidos, tenía la vida igual que los días. ¿recuerda la historia? adolescentes por cualquier calle de la ciudad al son de la derecha y un poco de marea, con las manos aun entrelazadas. ¿recuerda el nudo de nuestro cuento? nos empezamos a amar y eso fue bastante jodido, ya vio como terminamos. ¿recuerda el fin? tenía sabor a desarraigo, sabor a días olvidados, sabor a años vividos, sabor a hundimiento, sabor a olvido...
Disculpe si en mi texto me remonto a épocas y recuerdos que después de este tiempo no vienen al caso, pero lo he matado dos veces textualmente y hasta el momento sigue vivo en mí ¿cree usted que puede ser amor? porque yo tengo la hipótesis de que me ha costado olvidarlo y que lo recuerdo con humos innecesarios, con canciones que siempre suenan igual y con historias que solo usted contaba ¿me habré quedado en los recuerdos? es decir, las adolescencia no mata, pero usted fue de esos amores que uno empieza a valorar a querer a cuidar y que al final uno deja, porque se ve hundido en una serie de rollos innecesarios y mal vividos. Puedo matarlo textualmente y generar catarsis, aquí el punto es que usted me tenía los días con colores, sonrisas y sentimientos pero luego me los dejo grises tristes y llenos de odio; no le estoy sugiriendo que vuelva, realmente no le estoy pidiendo nada. ¿Recuerda cómo me dejo la vida? me habla de noches tenues, de sueños rotos, de aires helados, del ruido de los carros, de autopistas muertas, de libros a medio leer, de textos armados, mientras yo, me hundo me elevo y vuelvo a hundirme y así hasta que mis ojos retoman el color necesario, mis días se arreglan y el recuerdo se desbarata de a poquitos.
domingo, 5 de mayo de 2013
mas incoherencia la acrofobica no tiene
Odio sonreír por estupideces, si sonrío debe ser porque vale la pena. Odio maquillarme porque si lo hago siento esconder quien realmente soy, odio esos días donde hace sol y las personas utilizan sombrilla odio que se quejen de una y mil cosas pero no hagan nada al respecto, odio a los de ojos cafés claros porque tienen sonrisas lindas, odio levantarme y sentir un vacío en mi estomago, odio las mañanas sin tinto, odio las flores, odio las cartas de amor, odio los números, odio esos olores a creolina o azufre, odio tantas cosas que no se que amo, lo odio a usted y aunque me gustaría hacer una lista de los por qué, solo quiero decirle que no quería matarlo textualmente, que me costo mucho hacerlo pero que si no lo hacia la que se iba a morir era yo.
ahora quiero dejar una constancia a quienes lo quieren de que yo también lo hice, pero que a diferencia de ellos yo quise darle fin a una banalidad que me jodía la existencia, usted y solo usted, en un café le dije todo lo que sentía lo que nos rodeaban no eran mas que luces tenues, le alumbraban los labios y cada palabra salía con una babita suspendida en el aire, siempre supe que el amor era una sensación que quita noción de tiempo y espacio, por eso deduje que usted era quien merecía uno que otro te quiero, el rose de piel, la agitación y mil cosas mas que en dos segundos imagine. Quiero ser precisa y poco coherente nunca pense en darle una muerte textual porque en realidad lo quiero, pero es un querer malsano, un querer ligado a la incoherencia, un querer donde solo uno quiere y el otro se ríe, siendo así me alegra que la sonrisa se haya apagado y que su mirada café inquietante se haya cegado, si lo encontraron con el corazón por fuera, solo fue simbología, si hubiera querido olvido hubiera maserado su cerebro, pero necesitaba ver en su cara angustia desasosiego miedo y desilución, ahora suena algo como "Y se trata de vivir en este tropel, no pedir perdon, no decir adios, no hablar mejor, no decir me voy" y a ese ritmo de la derecha le sonrío y le abro la piel capa por capa mientras su respiración se agita a mi la felicidad me invade, ahora el odio es amor y el amor es odio, tiene el corazón mas pequeño de lo que imagine, el poco sentimiento seguramente era la estrechez de su corazón, ahora no se nada mas de usted de amor de babas de canciones o de algo que me joda la existencia.
sábado, 27 de abril de 2013
¡POR FIN!
No quiero datar el día de hoy, quiero ser breve y concisa, aunque no sea capaz de crearle una muerte textual aunque los te quiero sean mas producto de el sentimiento que de algo real, aunque en mi mente los recuerdos estes nitidos y vivos, aunque quisiera encontrarlo en mi camino unas cuantas veces, aunque quiera todo eso y mucho más el tiempo llego a su fin, no calcule la magnitud de mis actitudes y , quizás, mis sentimientos. Cada mirada era una complacencia de sonrisas, cada palabra era un extasis infinito de tranquilidad. No debo esperar lo que no existe, lo que murió porque nació prematuro, los días solo lidiaban conmigo y mis esperanzas, no debo esperar por usted porque usted jamas espero por mi, mi miedo era enamorarme y caí en algo peor, caí en la espera en la esperanza en la emoción, una emoción sin base alguna. Lo único que queda de todo es lo que cada día imprimió en mi, un beso lo quiero dos besos buena suerte tres besos ¡hasta siempre!. Mi mas sincero deseo es olvidar la espera y que esto jamas llegue a sus manos, las despedidas son emotivas tristes y se olvidan, como las flores, la tranquilidad ahora me pertenece.
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